Los baños fríos en otoño pueden ayudar a tratar la gastritis crónica

Los expertos del Centro de Salud del Segundo Hospital Afiliado de la Universidad Médica de Chongqing dijeron que el agradable otoño es la estación dorada para hacer ejercicio, especialmente escalar, trotar y bañarse en agua fría.

Subir alturas puede aumentar la ventilación pulmonar y la capacidad vital, mejorar la circulación sanguínea y aumentar el flujo sanguíneo cerebral. Los beneficios de escalar en otoño son especialmente evidentes debido a la mejor calidad del aire. Cabe señalar que al escalar se debe evitar las mañanas y tardes cuando la temperatura sea baja, la velocidad de ascenso debe ser lenta y se debe agregar o quitar ropa a tiempo al subir y bajar la montaña.

El jogging tiene un efecto significativo en la mejora de la función cardiopulmonar. Para las personas mayores, correr también puede reducir en gran medida la posibilidad de atrofia muscular y obesidad.

El baño de agua fría consiste en bañarse con agua fría entre 5 ℃ y 20 ℃, la temperatura natural del agua en otoño está dentro de este rango. Los baños de agua fría pueden excitar los nervios y mejorar la resistencia del cuerpo a las enfermedades (lo que se llama "gimnasia vascular"). Además, tiene cierto efecto terapéutico auxiliar en la gastritis crónica, gastroptosis, estreñimiento y otras enfermedades.